Después hemos comenzado una de los recorridos más fáciles hasta ahora. Al llegar al punto de descanso hemos cogido fuerzas y hemos continuado.
Al llegar a Pedrouzo nos han servido lentejas, que aunque no suelen gustar, estaban buenas. De segundo hemos comido lomo adobado. Además, para comer se lo han "currado" y nos han dado cocacolas y fantas y de postre ¡sandía!
Hemos podido disfrutar también de un rato de piscina, aunque algunos no se han bañado por no ponerse el gorro de baño.
En el pabellón donde dormimos hoy hay otros grupos de Cataluña y Madrid, algunos muy guapos y guapas, por cierto.
by Ismael Cabeza y María Luna.
Puedo ver por vuestra crónica que os estáis "merendando el Camino",no me extraña,con esos profesores,madres y demás apoyo que os proporcionan adivinanzas,apoyo y piscolabis.Pues nada chicos,mucho ánimo,que ya no os queda nada para llegar a Santiago.
ResponderEliminarUn abrazo de parte de una profesora del Meléndez.